Cheesecake japonés, tarta de queso de algodón

Porción de tarta cheesecake japonés decorada con frambuesas y hojas de menta, cortada con tenedor

Cheesecake de algodón, tarta de queso japonesa

  • Partes: Molde de 22cm
  • Imprimir

Este pastel de algodón, conocido como 'cotton cheesecake' tiene una textura similar a la de un soufflé y tiembla al estar caliente. A diferencia de otras recetas, ésta no lleva nata, utiliza ingredientes simples para crear un resultado fuera de este mundo.

Ingredientes

  • 6 yemas
  • 6 claras
  • 290 g de queso crema
  • 160 g de leche
  • 140 g de azúcar
  • 70 g de mantequilla
  • 45 g de harina floja
  • 20 g de almidón de maíz
  • 1 cda de extracto de vainilla
  • 1 cdita de ralladura de limón
  • 1 cdita de jugo de limón
  • 1 pizca de sal
  • 50 g de azúcar glas para espolvorear*
  • Direcciones

    1. Colocar papel en el fondo de un molde de tarta desmontable de 16cm (o si el molde es de silicona, omitir este paso) y reservar.
    2. Llevar la mantequilla, el queso crema, la mitad del azúcar, el extracto de vainilla y la ralladura de limón a una cacerola a fuego bajo-medio, revolviendo cada tanto hasta que todos los ingredientes se integren. Retirar del fuego, ir agregando las yemas, mezclando cada una antes de agregar la siguiente, y luego tamizar la harina y la fécula de maíz y mezclar evitando que se formen grumos.
    3. Montar las claras a nieve con varillas o con batidora eléctrica, si se utiliza ésta última, colocarla en velocidad baja primero, y a medida que las claras vayan incrementando su volumen, agregar el jugo de limón, la pizca de sal e ir incrementando la velocidad. Una vez que tengan aspecto de espuma, agregar la mitad de azúcar restante de a una cucharada por vez, primero batiendo hasta que se integre totalmente a las claras. Continuar con la batidora hasta que se formen picos que no se desarman.
    4. Integrar las claras en tres partes a la mezcla anterior utilizando una espátula con movimientos lentos y envolventes, desde afuera hacia adentro. Una vez se haya obtenido una crema lisa, echar en el molde y dar unos golpes contra la mesa para que suban las burbujas y no queden a la vista al cortar las porciones. Si el molde es desmontable, forrar con papel de aluminio para que el agua del baño María no penetre en la tarta.
    5. Colocar el molde dentro de una fuente, y una vez en el horno, echar agua hirviendo hasta cubrir dos dedos de altura. Hornear a 180° C / 350° F durante 20 minutos, pasado ese tiempo, abrir la puerta del horno durante unos segundos y bajar la temperatura a 110-120° C / 220-240° F y hornear durante 50-60 minutos más. Dejar en el horno apagado durante media hora.
    6. Con cuidado, retirar el molde del horno, quitar el papel aluminio y desmoldar sobre un plato con papel vegetal para evitar que la parte superior se pegue en el plato. Volver a dar vuelta, esta vez sobre el plato en donde vaya servido y espolvorear con azúcar glas. Servir con frutos rojos y hojas de menta.

    *El azúcar glas puede ser reemplazado por mermelada de albaricoque (damasco) o melocotón (durazno) pincelada en la parte superior.

    ¿Qué te ha parecido esta receta?

    Haz clic para puntuar

    Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

    Hasta ahora, ¡no hay votos!

    Mostrar Comentarios (0)

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

    Más artículos
    Canastas de barquillo en plato
    Canastas para helado, receta de barquillos crujientes