Cheesecake de algodón, tarta de queso japonesa
Este pastel de algodón, conocido como 'cotton cheesecake' tiene una textura similar a la de un soufflé y tiembla al estar caliente. A diferencia de otras recetas, ésta no lleva nata, utiliza ingredientes simples para crear un resultado fuera de este mundo.
Ingredientes
Direcciones
- Colocar papel en el fondo de un molde de tarta desmontable de 16cm (o si el molde es de silicona, omitir este paso) y reservar.
- Llevar la mantequilla, el queso crema, la mitad del azúcar, el extracto de vainilla y la ralladura de limón a una cacerola a fuego bajo-medio, revolviendo cada tanto hasta que todos los ingredientes se integren. Retirar del fuego, ir agregando las yemas, mezclando cada una antes de agregar la siguiente, y luego tamizar la harina y la fécula de maíz y mezclar evitando que se formen grumos.
- Montar las claras a nieve con varillas o con batidora eléctrica, si se utiliza ésta última, colocarla en velocidad baja primero, y a medida que las claras vayan incrementando su volumen, agregar el jugo de limón, la pizca de sal e ir incrementando la velocidad. Una vez que tengan aspecto de espuma, agregar la mitad de azúcar restante de a una cucharada por vez, primero batiendo hasta que se integre totalmente a las claras. Continuar con la batidora hasta que se formen picos que no se desarman.
- Integrar las claras en tres partes a la mezcla anterior utilizando una espátula con movimientos lentos y envolventes, desde afuera hacia adentro. Una vez se haya obtenido una crema lisa, echar en el molde y dar unos golpes contra la mesa para que suban las burbujas y no queden a la vista al cortar las porciones. Si el molde es desmontable, forrar con papel de aluminio para que el agua del baño María no penetre en la tarta.
- Colocar el molde dentro de una fuente, y una vez en el horno, echar agua hirviendo hasta cubrir dos dedos de altura. Hornear a 180° C / 350° F durante 20 minutos, pasado ese tiempo, abrir la puerta del horno durante unos segundos y bajar la temperatura a 110-120° C / 220-240° F y hornear durante 50-60 minutos más. Dejar en el horno apagado durante media hora.
- Con cuidado, retirar el molde del horno, quitar el papel aluminio y desmoldar sobre un plato con papel vegetal para evitar que la parte superior se pegue en el plato. Volver a dar vuelta, esta vez sobre el plato en donde vaya servido y espolvorear con azúcar glas. Servir con frutos rojos y hojas de menta.